Este plan es el resultado de un protocolo de intenciones firmado en 2014 entre la Xunta y el Gobierno central, que establecía una inversión de diecisiete millones de euros para llevar a cabo toda una amplia serie de actuaciones, algunas de ellas ya en marcha, que permitirán mantener de forma idónea la funcionalidad religiosa y cultural del templo, y poner en valor los recursos patrimoniales y culturales que posee.
El acuerdo tiene una especial importancia, no solo porque permitirá desbloquear toda una serie de obras para garantizar la perfecta rehabilitación del monumento, sino porque supone establecer un cauce de cooperación entre las tres instituciones.
En esta misma línea, también cabe destacar que la Catedral Compostelana tiene un especial valor a la hora de promocionar el Camino de Santiago y la peregrinación, lo que lo convierte en el mejor activo para la celebración del próximo Xacobeo.
De esta forma, las obras se desarrollarán a lo largo de cuatro fases, con el objetivo de garantizar la finalización de todos los trabajos antes de la ceremonia que se desarrollará el 31 de diciembre de 2020 para abrir la Puerta Santa.
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